SABER PENSAR. 2. LA CRUDA REALIDAD.

“Lo que un hombre piensa de sí mismo,
esto es lo que determina -o, más bien, marca- su destino”
Henry David Thoreau (1817-1862)

Por muy raro que nos parezca, ese ESQUEMA DE FUNCIONAMIENTO de nuestra mente que he expuesto en el post anterior y que encontramos tan SENCILLO (en parte, por lo mucho que lo he simplificado) no suele funcionar especialmente bien. Más bien diría que FUNCIONA MAL. No solo es que utilicemos únicamente el diez por ciento de nuestro cerebro -como tantas veces se oye decir- como resultado de un proceso de acomodación que ha durado cientos de miles de años (y quien piense que somos vagos por naturaleza, acertará), es que los hechos nos indican que nuestro proceso de razonamiento esta plagado de INTERFERENCIAS que desvirtúan en gran medida los resultados.

¿A qué llamo interferencias? Básicamente, a toda aquella circunstancia que hace que nuestro cerebro, o bien NO VEA LA REALIDAD, o VEA UNA REALIDAD DIFERENTE a la existente. En estos casos nuestra mente está realizando una INTERPRETACIÓN DEFICIENTE de la realidad que observa, así como de las posibilidades de alcanzar nuestros porpósitos. Una deficiente interpretación de la realidad desvirtúa todo el proceso de razonamiento, por lo que podemos llegar a tomar decisiones erróneas, o no tomar ninguna decisión (ni la acertada, siquiera). Si nuestra mente ve un arma letal en manos de un asesino donde solo hay un carpintero con un martillo, seguramente que salgamos huyendo despavoridos, cuando no hay ninguna razón para ello.

A lo largo de mi vida he constatado que nuestras limitaciones se resumen en DOS GRANDES FUENTES DE INTERFERENCIAS. Estas son las siguientes:

1. LAS RUTINAS DE PERCEPCIÓN

La primera fuente de interferencias son las rutinas de percepción que tenemos. Tenemos una agobiante tendencia a ver, no la realidad existente, sino la realidad que PERPETUA NUESTROS HÁBITOS DE CONDUCTA. Tenemos una gran predisposición a interpretar la realidad con las claves de la realidad ya vivida y aceptada (para bien o para mal). Por ejemplo, si trabajamos como tesoreros tenderemos a ver cualquier oportunidad de negocio en función del efectivo que restará de la empresa. Actuamos así, tanto por costumbre como por comodidad.

Esta distorsión es muy grave por cuanto NOS IMPIDE VER PERSPECTIVAS ENRIQUECEDORAS de la realidad. Realmente, este problema provoca una REDUCCIÓN DRAMÁTICA DE LA VERDADERA DIMENSIÓN DEL MUNDO REAL, de tal manera que vivimos ajenos a una exuberante realidad llena de posibilidades. Por muy duro que pueda sonar, LO QUE NO VEMOS, SENCILLAMENTE NO EXISTE PARA NOSOTROS, ni existen las infinitas posibilidades que nos podría sugerir. En otras palabras: VIVIMOS ENTRE LAS ESTRECHAS CUATRO PAREDES EN LA QUE NOS ENCIERRA NUESTRA IGNORANCIA, FRUTO DE UNA MALSANA ACTITUD ACOMODATICIA.

2. EL CONDICIONANTE EMOCIONAL

La segunda gran fuente de interferencias es lo que llamo el condicionante emocional: NUESTRAS EMOCIONES SESGAN NUESTRA PERCEPCIÓN y, por extensión, la forma en la cual la interpretamos. Hay una serie de rasgos que se han perpetuado en nuestro carácter: LA SENSACIÓN DE PEQUEÑEZ, LA DEBILIDAD, EL TEMOR, LA DESCONFIANZA SOBRE NUESTRAS CAPACIDADES Y POSIBILIDADES, LA DESCONFIANZA HACIA EL TALENTO AJENO, LA CONFIANZA ENCONTRADA EN EL IRRACIONAL COMPORTAMIENTO DE MANADA, etc... En este caso, el problema no es que no veamos la realidad existente, sino que LA DISTORSIONAMOS Y LA DESPRECIAMOS por considerar que pertenece a un ámbito potencialmente PELIGROSO para nuestra SUPERVIVENCIA FÍSICA Y, SOBRE TODO, PSÍQUICA.

Lo grave de esta situación es que vemos ese enriquecedor mundo que está a nuestro alcance, pero le damos la espalda por puro miedo. RENUNCIAMOS A ESE MUNDO DE POSIBILIDADES, CERRAMOS LA PUERTA A LA IMAGINACIÓN, A LOS LEGÍTIMOS DESEOS, A LOS VIVIFICANTES SUEÑOS.

Solo añadir que, fruto de estas dos fuentes de interferencias, se produce un DAÑO COLATERAL también muy grave: no nos conformamos solo con destruir nuestras propias posibilidades, sino que también nos obsesionamos en destruir la de los demás. En un curioso intento de apagar ese SENTIMIENTO DE CULPA Y FRACASO que nos acosa cuando asumimos una AUTOLIMITACIÓN ACOMODATICIA, nos obsesionamos por conseguir que los demás también se autolimiten, para que no cuestionen -por la vía de los hechos- NUESTRA PROPIA INCAPACIDAD. Realmente preocupante, pues es la causa de envidias, rencores, deslealtades, indisciplinas o traiciones… Es la fuente de nuestra MEDIOCRIDAD SOCIAL.

Pero, SITUÁNDONOS EN POSITIVO, ¿cuáles son los rasgos fundamentales de eso que podemos llamar SABER PENSAR? ¿Cuál debe ser nuestra ACTITUD respecto a nuestro proceso de razonamiento? ¿Por qué es infinitamente más importante nuestra ACTITUD RESPONSABLEMENTE ASUMIDA que nuestras CAPACIDADES INNATAS? Próximo post, para quien esté interesado…

Emilio Muñoz
Soluciones reales de gestión para la empresa

© TODOS LOS DERECHOS RESERVADOS

MyFreeCopyright.com Registered & Protected

Comentarios

Lo + visto

'MBA PERSONAL' DE JOSH KAUFMAN - UNA INCISIVA VALORACIÓN DEL LIBRO

EMPRENDIMIENTO DIRECTIVO: UNA COMPETENCIA BÁSICA EN EL ARTE DE DIRIGIR

INCONFORMISMO, REBELIÓN Y RENOVACIÓN: EL CICLO VIRTUOSO DEL PROGRESO

¿PREVISIONAL O PROSPECTIVA? 2.- ¿QUÉ FACTORES SE HAN DE TENER EN CUENTA PARA DISEÑAR NUESTRA HERRAMIENTA DE PLANIFICACIÓN?

FACTORES ACTUALMENTE CLAVE PARA LA SUPERVIVENCIA Y EL PROGRESO EMPRESARIAL

MOTIVACIÓN E INICIATIVA: TODO EMPIEZA POR UNO MISMO (DE LOS VERDADEROS ALIADOS)