DE LOS CÁNCERES DE LA SOCIEDAD Y DE LA ECONOMÍA ESPAÑOLA - 1. LOS PROBLEMAS

"En los momentos de crisis, sólo la imaginación

es más importante que el conocimiento"

Albert Einstein (1879 - 1955)

NO HAY CRISIS CUANDO LAS COSAS SE HACEN BIEN, esta es una de mis máximas. Y no hace falta ser el máximo exponente de nada, sino, simplemente, hacerlo mejor que la mayoría, algo que puede parecer muy difícil pero que en el contexto social y económico que nos ha tocado vivir en Europa es muy fácil.

 

Y NO TENEMOS EXCUSAS: Si viviéramos en un entorno excelente, nos veríamos influidos por él y podríamos apoyarnos en sus bondades para sacar adelante nuestro negocio. Sin embargo, vivimos en un entorno de decadencia en Europa, algo que no debe determinar nuestro destino. Al contrario, si el entorno no es bueno, no tiene por que marcar nuestras posibilidades porque ese entorno de medianía nos hará más fácil triunfar.

 

Deteniéndonos en la ECONOMÍA ESPAÑOLA, en concreto, podemos anticipar que nos quedan muchos años de soportar PESADAS CARGAS. Es el coste de nuestra MEDIOCRE CULTURA SOCIAL Y ECONÓMICA, que se resume en la expresión de “CULTURA DEL PELOTAZO”, una versión más moderna y agresiva del “ande yo caliente y ríase la gente” que viene a premiar el hecho de aprovecharse del esfuerzo ajeno sin el menor decoro, un principio muy extendido en nuestra sociedad, empezando por nuestros representantes públicos.

 

A continuación describo unos cuantos rasgos de esa cultura (porque nuestros problemas siempre han tenido una raíz cultural, MUY DIFÍCIL DE CORREGIR). Aclaro que voy a plantear un marco generalizado que no menciona numerosas y honrosas excepciones, que deben ser el ejemplo a seguir. Los rasgos fundamentales de esa cultura serían: 

1. La LEY DEL MÍNIMO ESFUERZO, también conocida por: “¡Qué trabajen los demás!”. Se manifiesta con toda su crudeza (pero no solo en ellos) en una juventud FALTA DE INQUIETUDES, SIN ILUSIONES, CON UNOS VALORES MUY SIMPLES, que dedica su mayor esfuerzo para buscar la forma de no tener que esforzarse. Por supuesto, como ya he dicho, estoy generalizando, pero la consecuencia más grave de todo esto es que el colectivo de trabajadores y empresarios se está alimentando de este semillero. No extraña, por tanto, la falta de rigor e ideas de nuestros dirigentes sociales y económicos. En definitiva, NOS FALTA ENERGÍA, AMBICIÓN Y RECORRIDO.
2. PASIÓN POR LAS APARIENCIAS. Cualquier aspecto de nuestra vida se ha convertido en un medio de propaganda de nuestra ENGAÑOSA GRANDEZA. Ahí tenemos el caso de nuestra riqueza inmobiliaria, basada en una ESPECULACIÓN grosera (fomentada por las instituciones públicas para sufragar el gravoso coste de su complejidad, y para beneficiar intereses privados afines) y por una generosidad crediticia temeraria (más palpable en los años previos a la crisis económica actual). Por no hablar de ese otro escaparate en el que hemos convertido a nuestros propios hijos, con una lucha enconada de los “papás” por ver quién se deshace en mayores regalías sin sentido o en accesorios más caros y ostentosos, y que ha ayudado decisivamente a EMPOBRECER Y ABLANDAR EL ESPÍRITU de nuestros jóvenes. En definitiva, nos faltan unos pilares sólidos sobre los que fundamentar nuestra solvencia económica: NOS FALTA UNA BASE SÓLIDA SOBRE LA QUE IMPULSAR UN DESARROLLO ECONÓMICO SOSTENIDO.
3. Por último mencionaría -para no extenderme más- a las ORGANIZACIONES SOCIALES: partidos políticos y sindicales, fundamentalmente, pero sin excluir a las organizaciones empresariales y a la intelectualidad (antaño abanderados del cambio y hoy sumisos y serviles comparsas, acomodados en el reparto de prebendas desde las diferentes instancias del poder). Todos estos organismos se han subido al carro del poder y, con el permiso de una población desentendida, acrítica y dócilmente manipulada, han perpetuado un “estado de la cuestión” en la que la MEDIOCRIDAD, el PELOTAZO, el AMIGUISMO y la sinvergonzonería carente de pudor, son el triste referente del ejercicio de nuestra voluntad, de nuestra libertad y de nuestros poderes económicos. Tanto éxito han tenido, que este país ha visto multiplicarse sin sentido y con un alto coste económico el APARATO INSTITUCIONAL, con poderes múltiples y sobrepuestos, sin mencionar la creación de un CUERPO NORMATIVO pesado, complejo y extremadamente regulador de todos los aspectos de nuestra vida púbica e, incluso, de parte de las dimensiones de nuestra vida privada, Fiel reflejo de esa sociedad anestesiada y víctima de sus propias DEBILIDADES, RANCIOS VALORES Y COMPLEJOS.

MUCHO DEBEMOS MEJORAR si realmente deseamos ser los protagonistas de nuestro futuro y, por supuesto, sin depender de terceros. Durante las últimas décadas hemos vivido un periodo de bonanza que se ha beneficiado en gran medida de las ayudas de la Unión Europea. Ayudas cuya cuantía se verán reducidas drásticamente por la crisis y por la incorporación de países con menor renta per capita que el nuestro, que serán destinatarios preferentes de fondos europeos. O TOMAMOS LAS RIENDAS DE NUESTRO DESTINO O SEREMOS SIMPLES COMPARSAS DE NUESTRAS CIRCUNSTANCIAS. O empezamos a aceptar nuestras debilidades y reconocer nuestros errores, o seremos víctimas de nuestra mediocridad. NOSOTROS -SOLO NOSOTROS- DECIDIMOS...

 

Emilio Muñoz
Soluciones reales de gestión para la empresa

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